Julio es uno de los meses más calurosos en Yucatán, con lluvias frecuentes y un ambiente perfecto para disfrutar de los cenotes. Sin embargo, la temporada también conlleva riesgos asociados al exceso de visitantes y las condiciones climáticas. Por ello, aquí tienes una guía de los cenotes más seguros para visitar en julio, con protocolos y recomendaciones para una experiencia responsable.
1. Cenote Santa Bárbara (Homún)
- Espacios delimitados para nadar, con plataforma y salvavidas.
- Señalética de profundidad y zonas restringidas.
- Baños, regaderas y casetas para resguardo en caso de lluvia.
- Personal capacitado y límite de visitantes simultáneos.
2. Cenote X’batún (Homún)
- Zonas delimitadas de poca y mayor profundidad.
- Uso obligatorio de chalecos salvavidas.
- Resguardo y refugio en caso de tormentas.
- Restricciones de acceso en temporadas de lluvias intensas.
3. Cenote Kankirixché (Cuzamá)
- Visita en koya (carro de caballos) y guía local.
- Áreas con sombra natural y estructuras seguras para acceso al agua.
- Chalecos salvavidas, monitoreo y restricciones en lluvia fuerte.
4. Cenote Yokdzonot (Puuc)
- Operado por cooperativa local con fuerte énfasis en seguridad.
- Rutas delimitadas, señalización, escaleras y barandales seguros.
- Casetas de emergencia y personal especializado.
5. Cenote Zacil-Ha (Cuzamá)
- Hidroterapia combinada con áreas recreativas.
- Zona de chapoteo para niños, con supervisión permanente.
- Cabeceras protegidas y resguardo ante lluvias.
6. Cenote Xlacah (Dzibilchaltún)
- Instalado dentro de zona arqueológica, con vigilancia constante.
- Guardavidas, delimitación de acceso y protocolos educativos.
- Buen mantenimiento y reglas claras de bioseguridad.
7. Cenote Sambulá (cerca de Tenabo)
- Cooperativa con buena organización, limpieza y señalización.
- Chalecos salvavidas y caseta contra la lluvia.
- Conciencia ecológica combinada con estrictos protocolos sanitarios.
8. Cenote San Ignacio (Dzidzantún)
- Operación comunitaria con enfoque en seguridad.
- Señalización de zonas profundas y equipo de rescate básico.
- Espacios techados para resguardo ante tormentas.
9. Cenote Noh-Mozón (Maxcanú)
- Chalecos, escaleras resistentes y salvavidas.
- Menor afluencia, ideal para quienes buscan tranquilidad con seguridad.
- Personal capacitado en primeros auxilios.
10. Cenote Xcajum (Muna)
- Ubicación semiurbana: rescate y ambulancia cercana.
- Señalización, casetas, barandales y seguridad reforzada.
- Rotación baja de visitantes y buenas condiciones del entorno.
Protocolos indispensables:
- Chaleco salvavidas obligatorio: aún si sabes nadar, el uso de chaleco es obligatorio y recomendado siempre.
- Guía o personal capacitado: cerciorarse de su presencia durante la visita.
- Señalización clara: zonas delimitadas, profundidad y protocolos en caso de alertas de lluvia.
- Responsabilidad personal: no nadar solo, evitar alcohol y seguir instrucciones del guía.
- Medidas bioseguras: uso de sanitizante, no usar repelentes contaminantes y desechar basura correctamente.
- Vestimenta segura: traje de baño cómodo, protector solar biodegradable y agua potable.
- Estar atentos al clima: actuar con rapidez y buscar refugio ante tormentas, rayos o corrientes.
- Emergencias previstas: saber la ubicación de caseta, puntos de auxilio, número de emergencias (9‑1‑1) y puntos de evacuación.
Conclusión: julio en Yucatán es ideal para conocer cenotes protegidos y comprometidos con la seguridad y el medio ambiente. Visitar con responsabilidad y optar por cenotes regulados garantiza una experiencia refrescante, segura y respetuosa con los visitantes, las comunidades locales y el entorno natural.