Del 21 al 26 de julio, Mérida se convierte en la sede de una celebración artística sin precedentes: la tercera edición de la Jornada Cultural Yucatán–Guanajuato 2025. Este evento nace del hermanamiento entre ambos estados y busca fortalecer los lazos culturales, musicales y educativos a través de una cartelera que conjuga talento local e invitados de renombre nacional.
Durante seis días, el corazón del centro histórico de Mérida se llenará de música, arte y encuentro con lo mejor de dos regiones clave del país. La programación se extiende a escenarios emblemáticos como el Teatro José Peón Contreras, el Teatro Daniel Ayala, la Catedral de San Ildefonso y el Palacio de la Música, donde el público podrá disfrutar de presentaciones gratuitas y clases magistrales.
El evento arranca con un homenaje sinfónico a José José, ícono de la música romántica mexicana, y un esperado tributo a Queen, con arreglos orquestales a cargo de la Orquesta Sinfónica de Yucatán (OSY), acompañada por músicos invitados de Guanajuato.
Una de las presentaciones más esperadas es la “Rapsodia Mexicana”, un concierto de piano interpretado por la virtuosa Argentina Durán, oriunda de León, que se presentará el 25 de julio en el Palacio de la Música. En paralelo, jóvenes talentos yucatecos compartirán escenario con estudiantes del Conservatorio de Celaya en una serie de conciertos académicos abiertos al público.
Además de los espectáculos, se realizarán clases magistrales, talleres de apreciación musical y charlas sobre el desarrollo artístico entre ambos estados, dirigidas tanto a profesionales como a público general. La iniciativa busca fomentar el intercambio cultural y educativo, con énfasis en la juventud artística del sureste mexicano.
El 26 de julio, la jornada cerrará con un concierto coral sinfónico en la Catedral de Mérida, uniendo voces y músicos de ambas entidades en un acto simbólico de unidad. Se espera una gran afluencia, por lo que las autoridades recomiendan llegar con anticipación.
La Jornada Cultural Yucatán–Guanajuato 2025 representa mucho más que una agenda de conciertos: es un espacio de encuentro, identidad compartida y celebración de la diversidad artística del país. Para los habitantes de Mérida y visitantes, es también una oportunidad única para disfrutar de espectáculos de calidad sin costo y en escenarios históricos.
Con una curaduría que apuesta por la fusión entre tradición y modernidad, esta jornada fortalece el papel de Yucatán como epicentro cultural del sureste. Y para quienes buscan una actividad diferente este mes de julio, representa una experiencia inolvidable.